lunes, 21 de enero de 2013

We are the universe.

Planetas que se hacen satélites, atraídos por una fuerza mayor.
Soles que deslumbran una galaxia, arden, se congelan por dentro y se apagan.
Estrellas fugaces que iluminan durante segundos, que no puedes perseguir, y dejan una estela de deseos por donde pasan.
Astros que viven para girar en torno a algo más grande, y en ocasiones descubren su propia órbita.
Estrellas que brillan desde fuera, aunque lleven siglos apagadas en su interior.
Cometas que viven corriendo solas , y que se ven de vez en cuando, sin tiempo para parar. Hay lunas de las que nunca nadie conocerá una cara.
Algunos planetas tienen atmósfera, otros no, pero los meteoritos son iguales para todos.
Constantes explosiones que lo rompen todo, y forman el universo de nuevo.
Rachas de viento, tormentas de arena, el fin de la vida.
Y el ciclo sigue, no para por nada.

Midair.

Mi vida sigue sonando como esa canción, aunque no haya nadie cantándola.
Esto es más de lo que pensé que podía existir.  Soy más de lo que creí ser.
El final es desconocido, y llega siempre demasiado rápido.
Ya no necesito palabras para creer ser algo.
Una tarde me arranqué las tiritas, los cables, y las agujas de la piel.
Desconecté las máquinas que me mantenían viva, para acabar con todo, y descubrí que podía vivir sin horrocruxes.
Amar es suficiente. Y se puede hacer sin dosis necesarias.
Decían que esto era difícil. Y no es duro, ni complicado. Es como respirar.
Respirar el aire que tú has escogido para vivir.

Nature sets.

"Pinté la habitación de azul claro, me puse mi mono vaquero y dibujé nubes blancas en el techo, para que tuviéramos el cielo cerca.
Pintaste la buhardilla de dorado, para mirar al sol entrar por la ventana.
Hay conchas blancas en las paredes, cuadros pintados una madrugada cualquiera.
Los miércoles cambio las flores, todo está vivo. Tus silbidos llenan todo el espacio.
Me acaricias la espalda cuando no puedo dormir. Me cojes cuando te miro llorosa durante las películas tristes. Me besas cuando me desvelo de noche. Te ríes cuando hago números musicales encima de la mesa. Entiendes todos mis silencios. Entiendes cuando has de respetarlos, y cuando tienes que abrazarme. Me enseñaste a no esconderme de nada.
Nunca somos infelices. Nunca del todo."

Wallflower.

"Sentí algo increíble cuando por fín tuve la cinta entre las manos. Pensé para mí que en mi mano tenía una cinta llena de recuerdos y sentimientos y grandes alegrías y tristezas. Ahí, en la palma de la mano. Y pensé en cuanta gente ha amado esas canciones. Y cuanta gente lo ha pasado muy mal por su culpa. Y cuanta gente lo ha pasado muy bien con ellas.Y cuanto significan de verdad esas canciones. A mí me han echo muy feliz. Y soy sólo una persona"

"Cuando acabé de leer el poema, todo el mundo se quedó en silencio. Un silencio muy triste. Pero lo increíble es que no era una tristeza mala, para nada. Sólo algo que hizo que todos miraran a los demás a su alrededor y supieran que estaban allí. Sam y Patrick me miraron a mí. Y yo les miré a ellos. Y creo que comprendían. Nada en concreto, en realidad. Y creo que eso es todo lo que le puedes pedir a un amigo."

"- Tú ves cosas. Te las callas. Y las comprendes.
 No sabía que los demás pensaran cosas de mí. No sabía que miraran. (...) Y empezé a llorar. Y nadie en esa habitación me miró raro. Y entonces empezé a llorar de verdad."

"Era un viejo disco de 45 rpm que tenía la canción Something de The Beatles. Solía escucharla todo el rato cuando era pequeño y pensaba en las cosas de los mayores. Me iba a la ventana de mi dormitorio y contemblaba fijamente mi reflejo en el cristal y los árboles detrás de él y escuchaba la canción durante horas. Decidí entonces que cuando conociera a una persona que me pareciera tan bonita como la canción se la regalaría. Y no me refería a bonita en el exterior. Me refería a bonita en todos los sentidos."